Tuesday, September 13, 2011

La plaza principal 24 de septiembre Más que un paseo es el corazón de Santa Cruz

Su nombre evoca la fecha del aniversario de Santa Cruz: 24 de septiembre. Pero; además, rememora la guerra de la Independencia de nuestro departamento que inició un 24 de septiembre de 1810 y que culminó 15 años después, el 14 de febrero de 1825; así lo manifiesta Juan Oliva, de 67 años, al momento de preguntarle el significado que tiene para él, la Plaza Principal.

Contemplando el cuadro que forma la imagen de Ignacio Warnes y la fachada de la Catedral Metropolitana dice: "Dónde poder ir y sentir lo mismo. En lo personal aquí hay todo lo que busco y lo que quiero ver: noticias, historia, naturaleza, aunque ya no como antes, afirma y continúa...amigos, y mujeres bellas", expresa sonriendo. Su versión engloba el sentir de muchos cruceños.

Un pedazo de historia. Es que la plaza 24 de Septiembre es el corazón de la ciudad y centro de todo tipo de manifestaciones cívicas, sociales, culturales. Su historia se remonta al año 1850, cuando el gobierno de Isidoro Belzu, contrató al francés Carlos de Chalot para convertir la originalmente llamada “Plaza de la Concordia”.

Acorde a la época, Chalot diseñó un paseo geométrico simple, respondiendo a la moda francesa dominante en aquel entonces. Asimismo, se enladrilló la acera perimetral y cuatro radiales convergentes en un núcleo central, donde estaba ubicada la principal noria de la ciudad que abastecía de agua a quienes no poseían una.

En ese momento también se inició la construcción del murete perimetral, obra que no impidió que continúen las corridas de toros en el interior de la plaza. Posteriormente, el agotamiento de la fuente de agua obligó a que esta se reemplace por una glorieta.

Cambió su nombre y su forma, pero no su esencia. En 1910, la Plaza de la Concordia cambió su nombre por el de plaza 24 de Septiembre, conmemorando el centenario del Grito Libertario ocurrido allí mismo. La inserción del monumento a Ignacio Warnes se realizó diez años después, en 1920. Con el pasar de los años ha sufrido una serie de transformaciones estructurales, el más significativo en el año 2005 con la peatonalización de las calles circundantes. Aún así, mantiene la esencia de abrazar a propios y extraños.

Un referente del turismo cruceño

Quienes visitan la ciudad no pueden dejar de presenciar el paseo que es el centro del circuito turístico que evoca la historia de Santa Cruz y la lucha de su gente.

PERSONAJES
Han hecho de la Plaza su segundo hogar...

MARIO FRÍAS "FUSIL”: 56 años lustrando " Conocí la Plaza a mis 8 años, luego de la guerra civil, por los años 1949 cuando llegué a esta ciudad. Santa cruz no era más que hasta la plaza del cementerio, la vida era muy linda en esa época, me refiero a la tranquilidad que había y a la hospitalidad de su gente.

En aquel entonces mi tío me compró una caja de lustre y empecé a limpiar los zapatos a las autoridades de la Brigada, la Prefectura y de la Policía hasta que me quedé a trabajar aquí.

Óscar paz franco,
Visitante, de 67 años
"Vengo desde hace tres años a diario a la Plaza a compartir con un grupo de amigos a charlar, jugar ajedrez o simplemente para contemplar la belleza de nuestro paisaje, en las mañanas y en las tardes, principalmente .

Las personas de la tercera edad vemos en la Plaza un lugar ideal para rememorar lo que vivimos en nuestra juventud tomándonos un cafecito y para enterarnos del diario acontecer.

Si bien nuestra Plaza luce hermosa y está modernizada, añoramos los árboles y la esencia camba que había antes de su transformación. Sigue siendo el lugar de manifestaciones del sentir cruceño". Nunca me vi trabajando en otro sitio que no sea la Plaza y voy hacerlo mientras Dios me dé las fuerzas para seguir haciéndolo en este paraíso".

Filemón Barba.
Más de 60 años retratando a Santa Cruz
" Empecé a retratar a mis 14 años con mi máquina minutera, que me ha acompañado y ha presenciado al igual que yo todo tipo de acontecimientos que hubo en este escenario.

Más que darme la oportunidad de sacar adelante a mis siete hijos y a mi esposa, mi trabajo me ha dado un sinfín de alegrías.

Me he resistido a cambiar de equipo o de irme a otro lugar porque es este mi sitio. Siento que con mi instrumento puedo hacer que esta Plaza o la Catedral vivan para siempre en cada fotografía en blanco y negro que recuerden a la verdadera Santa Cruz.