Saturday, March 17, 2012

Una polémica muestra fotográfica La belleza es mortal

La brevedad de lo de afuera es la consigna de esta serie, realizada por Carsten Witte.

El fotógrafo alemán Carsten Witte deslumbró recientemente al mundo con una colección de retratos escalofriantes que escenifican la fugacidad de la belleza. Gótico por esencia es el último gesto de este artista. Intuition se denomina la serie de fotografías que ilustra las caras pintadas de mujeres atractivas, como si estuviesen a punto de convertirse en calaveras y extinguirse. Espectrales signos cadavéricos se advierten en rostros hermosos que superponen las facciones de la muerte.
Blanco y negro. La composición juega con el tiempo y permite ver la vitalidad en relación con la podredumbre. Con la base de colores primarios, las instantáneas resultan impactantes a primera vista. Los rostros, inexpresivos y fríos, se muestran como una manifestación del abandono, tras haber perdido el halo de la vida. Tal como recita el verso del poeta español Quevedo: “Polvo serás, mas polvo enamorado”, Intuition es una oda a la brevedad y a la fragilidad de las cosas que sólo son efímeras como el amor.
En la transformación vive el encanto. La belleza es el futuro polvo en esta colección pictográfica. “La idea principal detrás de mi trabajo es que todo constantemente cambia, se altera, pero la fotografía puede conservar el instante. La belleza no significa nada sin el conocimiento de que puede desaparecer”, comentó el artista, al destacar la actividad inútil y casi exigua que tiene, pese al papel protagónico que puede cumplir en la sociedad.
El arte por encima de la vida. La fotografía es lo que prevalece como un documento de la memoria. El arte es un testimonio de los cambios del tiempo, y es el único capaz de dejar una impresión duradera, un rastro de prevalecencia, según la concepción de Witte.
Un melancólico pesimismo renacentista se prescribe en esta fotografía del alemán, que anuncia el mal de los medios informáticos en una era visual, en la que se tiende a dar mayor realce a la belleza física. Curioso resulta que un fotógrafo de modas como Witte, de sobra conocido en los bastidores editoriales de campañas publicitarias y desfiles, quien trabaja en todo instante con mujeres hermosas, difunda este credo, que al final despoja de todo valor esta idolatría. Si bien la industria de la moda se alimenta de cánones de perfección, esta fotografía los desmiente.

1962 En este año nació el fotógrafo que da realce a la muestra de rostros fugaces y bellos.

1995 es cuando comenzó a tener su estudio, desde el cual elabora exposiciones.

Carsten Witte. Es un fotógrafo nacido en Hamburgo, Alemania. Se desempeñó en el mundo de la alta costura y dejó un sello de atención a los pequeños detalles en su labor. Trabaja para varias editoriales de moda, así como para distintas campañas en todo el mundo. Su trabajo personal, su obsesión por los trazos de la belleza, lo llevaron a realizar diferentes exposiciones en París, Hamburgo, Colonia y Berlín. Es denominado el “David Lynch de la fotografía”.